domingo, 5 de junio de 2011

Percances en la madrugada.

Me he dado cuenta de que tuve una experiencia hace ya un tiempecillo que no he contado aquí.
Hace ya un mes o así vino a Madrid un primo lejano mío que vive con su familia en Australia. A la familia de allí aún no la conozco, pero a él si porque ya vino un verano hace unos tres años. Esta vez vino con un amigo suyo. Estuvieron aquí varias semanas, y cuando su amigo se había ido a Londres y a él le quedaban cuatro días para irse, lo invitamos un fin de semana a casa.
El caso es que el sábado por la noche nos invitó a cenar al "Ribs"( que, todo hay que decirlo, tiene unas costillas que te hacen llorar). La verdad es que cenamos muy tarde pero mereció la pena porque nos pusimos hasta arriba. Una vez acabada la cena decidieron que querían ir a algún pub que estuviera bien para tomar una copa. La verdad es que en ese momento me quedé bastante sorprendida porque yo no aparento los dieciocho ni por asomo. A pesar de eso tuvimos fe y decidimos intentarlo. Y, para mi sorpresa, me dejaron pasar. Fue un rato muy agradable a pesar de que la música no era muy buena.
Pero lo mejor viene cuando salimos de allí y nos dirigimos hacia el coche a eso de las tres de la mañana. Nos acercábamos al coche cuando vimos que entre el coche y el cubo de basura que tenía al lado, había dos chicas agachadas. No hizo falta acercarse mucho para saber que estaban completamente bebidas. Una de ellas se puso de pie, pero tenía los pantalones bajados y parecía tener dificultades para subírselos. Nos fuimos acercando lentamente al coche, pero la chica sin pantalones seguía apoyada en él. Al ver que entrábamos las entró la risa, y la chica que estaba en el suelo sentada empezó a murmurar "en su cohe María, encima en su coche". Mi padre les dijo a las chicas que le avisaran cuando ya no estuviera apoyada para que no se cayera al suelo, y en respuesta la chica sentada en el suelo le dijo que no se preocupara que había caído todo para el otro lado. A María le costó un infierno abrocharse al fin los pantalones, y eso que la chica del suelo la ayudaba. Cuando lo consiguieron se limitaron a colocarse el pelo y a decir "estoy bien, estoy bien".
No pude parar de reir durante todo el viaje de regreso. Fue una experiencia divertidísima.

lunes, 30 de mayo de 2011

Exámenes y más exámenes.

Siento no haber escrito durante la semana pasada, pero es que esta es una semana hasta arriba. Hay muchísimos exámenes muy importantes y con mucho que estudiar, como el de Biología, que lo llevo fatal. Es estresante estar bajo tanta presión.
Hoy hemos hecho el examen de Matemáticas en 4.A. Matemáticas es una asignatura que a mí me cuesta mucho, como a mucha gente. Este examen tenía que salir bastante bien ya que en el anterior tengo un 4,25. Y es que siempre me pasa lo mismo con los exámenes de esta asignatura: voy muy segura, llega el examnen y me pongo nerviosa, controlo el nerviosismo, hago el examen y estoy contenta con el resultado. Pero a continución viene la parte que más detesto. Me pongo a comparar lo que he hecho y lo que me han dado los ejercicos y veo que no los tengo bien del todo. Pero a pesar de eso, me sigo sintiendo segura porque creo que llegaré al aprobado. La mayor decepción llega cuando me dan el examen y al ver la nota me doy cuenta de que no es un aprobado, sino un casi aprobado.  Me esfuerzo, de verdad que me esfuerzo, pero se me hace muy pesado.
Pero bueno aún quedan algunos exámenes y no puedo quedarme lamentándome por cómo me ha salido, hay que seguir tirando con lo demás. Después de todo, para algo están las recuperaciones.
Suerte a todos estudiando.

domingo, 22 de mayo de 2011

Un poco de espacio.

La amistad es difícil. Lo sigo pensando, es complicado. Parece que los momentos malos ganan a los buenos. Y se me hace pesado, me canso. Intento tener paciencia, pero es duro.
Tengo una amiga a la que quiero mucho. Nuestra amistad surgió de un problema común: el desprecio por parte de otra persona. Nos empezamos a apoyar mutuamente, a contarnos lo que sentíamos y a darnos consejos. La cosa iba mejorando, encontramos consuelo la una en la otra. Empezamos a quedar con amigos y a pasárnoslo genial haciendo locuras. Algunas amistades que teníamos iban pasando, iban cambiando, pero nosotras seguíamos juntas. Todo hay que decirlo, su carácter siempre ha sido un poco extraño, cambiante, pero me acostumbré a ello y lo sobrellevaba bien. Hubo ocasiones en las que tuve que perdonar y olvidar algunas cosas, y lo hacía porque pensaba: "No lo dice de verdad, es un mal día". Y en muchas ocasiones era así. Pero cuando el día malo lo tenía yo, o cuando a la que se le escapaba algo era a mí, no se producía lo mismo. Me decía que era normal, era culpa mía y yo debía ceder. Pero la conocí hace mucho tiempo, y esa situación sigue en la actualidad.
Y yo sigo intentando borrarlo y pasar página, en parte porque ha tenido un problema familiar recientemente. Pero es que la cosa ya iba así desde antes de eso, y me estoy cansando. Me canso de tragra, de estar detrás, de rayarme, de sentirme confusa. Me canso de tirarme un día entero pensando si he hecho o dicho algo que haya provocado esa actitud de desprecio e ignorancia. Pero intento callarme, intento que no lo pase mal, intento no herirla con mis palabras. Y para ayudarme pienso en las cosas que ha hecho por mí, que las ha hecho. Pero no puedo evitar que mis pensamientos deriven en que yo tambien he hecho cosas por ella y no siento que se me muestre cariño alguno, no puedo evitar pensar que me está haciendo lo que ambas odiábamos, y lo que nos unió: desprecio. Y me siento dolida, y me da pena porque pienso en todo lo que hemos pasado. Y es que sé que ahora está así conmigo, y que cuando la vuelva a ver estará genial, pero volveremos a empezar.
Por eso he decidido darla espacio. Dejarla ser, ir a mi bola,estar con ella solo si me apetece, que es lo que ella hace. Y si por algún casual se la ocurre decirme algo, o enfardarse por mi actitud, usaré las mismas palabras que usa ella: "Es que hoy estoy antisociable".
Y que de esa manera se quede ella sola. Bueno no, ella y su espacio.

Decimos adiós a un viejo amigo.

Es cierto, se va. No podemos seguir negándolo y seguir creyendo que no pasará nunca. Perdemos algo que nos ha estado acompañando durante aproximadamente diez años. Se van las clases por la tarde.
Es la verdad, se van para no volver(a no ser, claro está, que alguien repita, cosa que espero no pase). Nos quedan únicamete siete días para acabar con aquello que tanto hemos criticado y odiado. ¿Un alivio? Por supuesto que si. Nadie puede negarlo, es insoportable tener que ir al colegio por la tarde. Y no solo por el hecho, ya de por sí pesado, de que te entra la pereza y las ganas de siesta, sino tambien por que somos de los pocos que tenemos clase por la tarde. A lo largo de todos estos años no han sido pocas las veces que nos hemos quejado sobre este aspecto. Nos hemos quejado, hemos intentado cambiarlo y nos han explicado una y otra vez el porqué de esto(razón que,sinceramente,sigo sin entender). Pero tras una muy larga espera nuestros deseos se van a ver cumplidos en un plazo de tiempo no muy largo.Así que se van. Llega junio, y con él un horario completamente placentero al que tendremos que ir acostumbrándonos porque es el que seguiremos teniendo.
Asi que, no os desesperéis, nos quitará algo de estrés...supongo.

martes, 10 de mayo de 2011

Price tag.

Se convierte en una obsesión que no te deja ser feliz. Te presiona a actuar de una forma descabellada. Parece ser tu amigo, te dice que te hará feliz pero se ríe a tu costa. No te da la felicidad, si acaso una extraña satisfacción al principio, pero se queda en eso. No es lo más importante por mucho que lo digan los demás, pero es necesario. No necesitas tener mucho, solo lo suficiente. ¿Lo adivinas? Es el dinero.
Hablando precisamente de esto hay una canción que suena ahora en la radio y que ha estado en mi cabeza todo el día.

http://www.youtube.com/watch?v=qMxX-QOV9tI

Seems like everybody's got a price,
I wonder how they sleep at night.
When the tale comes first,
And the truth comes second,
Just stop, for a minute and
Smile

Why is everybody so serious!
Acting so damn mysterious
You got your shades on your eyes
And your heels so high
That you can't even have a good time.

Everybody look to their left (yeah)
Everybody look to their right (ha)
Can you feel that (yeah)
Well pay them with love tonight...


It's not about the money, money, money
We don't need your money, money, money
We just wanna make the world dance,
Forget about the Price Tag

Ain't about the (ha) Ka-Ching Ka-Ching.
Ain't about the (yeah) Ba-Bling Ba-Bling
Wanna make the world dance,
Forget about the Price Tag.


We need to take it back in time,
When music made us all UNITE!
And it wasn't low blows and video Hoes,
Am I the only one gettin... tired?

Why is everybody so obsessed?
Money can't buy us happiness
Can we all slow down and enjoy right now
Guarantee we'll be feelin
All right.

Everybody look to their left (yeah)
Everybody look to their right (ha)
Can you feel that (yeah)
Well pay them with love tonight...

Yeah yeah
Well, keep the price tag
And take the cash back
Just give me six streams and a half stack
And you can keep the cars
Leave me the garage
And all I...
Yes all I need are keys and garage
And guess what, in 30 seconds I'm leaving to Mars
Yes we leaving across these undefeatable odds
It's like this man, you can't put a price on life
We do this for the love so we fight and sacrifice everynight
So we ain't gon stumble and fall never
Waiting to see, a sign of defeat uh uh
So we gon keep everyone moving there feet
So bring back the beat and everybody sing
It's not about...


Yeah yeah
Oo-oooh
Forget about the price tag

El día de la locura.

Una de mis amigas cercanas llevaba un tiempo desanimada debido a un problema familiar. Estaba triste como, es lógico, y eso nos hacía sentirnos mal ya que es una chica muy alegre. Por eso mi prima, otra amiga y yo decidimos hacerla una fiestecilla sorpresa para animarla un poco y decirla que la queremos.
Lo hablamos con sus padres para que lo supieran y pusimos una fecha. Por casualidades de la vida tuvimos que trasladar la fecha dos veces por problemas que nos fueron surgiendo y que impedían que quedáramos. Pero, para que no nos pasara la siguiente vez, pusimos un señuelo.
Y por fin después de todas las preparaciones llegó la esperada tarde. Yo estaba muy nerviosa y emocionada. El plan era que yo subiera a su casa, y cuando fuera a bajar tenía que hacerles una llamada perdida a mis dos amigas para que se preparaban. Además de eso yo tenía que ponerme a grabar antes de salir al portal para que todo quedara constatado. El problema es que vive en un bajo, y para cuando me quise dar cuenta no había terminado de hacer la llamada y aún no había sacado la cámara y ella estaba practicamente fuera. La llamé para que se parara mientras yo terminaba de hacer la llamada. Como tenía que sacar la cámara, grabar y salir antes que ella tuve que detenerla varias veces para que no saliera. Después de este obstáculo consuguí salir antes y grabarlo todo.
Bueno la verdad es que lo que planeamos no salió del todo bien. Habíamos comprado dos cañones de confeti que mis dos amigas tenían que lanzarla cuando saliera del portal. Pero ella salió y los cañones, a pesar del esfuerzo, no se disparaban. Esto produjo un momento de tensión para nosotras y un momento de frustación para nuestra protagonista. Finalmente los cañones funcionaron.
Tras llenarla de confeti hasta los pies, la coronamos como la más loca de las locas, con su banda y ramo de flores. Nosotras dos nos enroscamos serpentinas al cuello y nos pusimos accesorios bastante ridículos.
Tras esto, fuimos las cuatro hacia el carrefour, pero estuvimos todo el camino haciendo el tonto y armando escándalo con unos matasuegras que sonaban un montón. Pensé que no nos dejarían entrar con esas pintas, pero la verdad es que si.
Fue una tarde divertidísima y la animamos mucho.

sábado, 30 de abril de 2011

Defectos.

Cierto cada uno tenemos nuestros fallos. Y la verdad es que siempre tendemos a pensar que los de los demás son muchísimo más graves que los nuestros y que, en comparación, nosotros somos unos santos. Y puede que sea así, es problable que encontremos a alguna persona que tenga infinidad de fallos más que nosotros, pero esa no es la cuestión. Lo que yo quiero expresar es que a veces no hay que fijarse tantos en los fallos de los demás y que en otras ocasiones hay que, incluso, dejarlos de lado.
Una cosa está clara: nadie es perfecto. Puede que haya personas que se acerquen a la perfección o que más bien a nosotros nos lo parezca, pero es inevitable que en algún aspeto de su vida falle en algo. Y es que esto es una realidad, es algo que hay que asumir. Una cosa quiero recalcar, he dicho que nadie es perfecto. Exacto nadie, por lo tanto nosotros tampoco. Y es que hay ocasiones que, debido a nuestra personalidad o a que simplemente nos apetece criticar, tendemos a distorsionar nuestra visión en busca de fallos como radares. Y puede que esto parezca gratificante y que incluso sea hasta divertido, pero hay cosas que no llegamos a saber. Hay que tener en cuenta que lo que nosotros vemos de una persona, a no ser que tengamos una relación muy estrecha con la persona en cuestión, no es ni la décima parte de lo que es en realidad. Esto nos puede llevar a prejuzgar a alguien por lo que vemos cuando quizá la realidad es otra muy distinta. Es por eso por lo que no hay que fijarse tanto en los errores de los demás, porque por mucho que nos fijemos, ¿qué va a cambiar? Lo único que conseguiremos será minusvalorar a la persona y puede que cerrarnos en banda a conocerla.
En otras ocasiones hay que dejar los fallos y errores a un lado, dejarlos pasar. Y esto tal vez se deba a que lo que la persona haya dicho o hecho no fuera en realidad lo que queria decir o hacer. A todos nos ha pasado alguna vez que hemos dicho cosas sin pensar y no hemos sabido como enmendar esas palabras. Puede que otras veces no te pille de buen humor o que estés pasando por un mal momento y digas cosas que en tu sano juicio no dirías. Y aunque es verdad que en esas ocasiones por lo que te hayan dicho o hecho te hayas sentido herido o incluso despreciado, hay que saber olvidar. Hay que saber olvidar sobre todo si lo que se ha dicho o hecho ha sido por estar pasando un mal momento o estés de mal humor. Es verdad que a pesar de las circunstancias que esté pasando no debería pagarla contigo, pero en esos momentos hay que intentar comprender. Intentar averiguar cómo debe de sentirse y cómo lo debe estar pasando, así desarrollaremos la empatía. Y esto es lo que nos ayudará a no tenerlos en cuenta, a dejarlos pasar, a olvidar cualquier rastro que haya podido quedar en nuestro corazón, y así, borrar el dolor con ello.
Y puede que haciendo todo esto pensemos que no merece la pena o que incluso no nos llevemos el reconocimiento y el agradecimiento de la persona con la que hemos demostrado empatía, pero no todo en la vida es reconocimiento. Las buenas amistades no son aquellas en las que no hacen falta los reconocimientos, sino aquellas en las que hay un sacrificio, un buen sentimiento, una motivación. Por lo tanto, no pienses en tí primero, compadécete y demuestra así ser un buen amigo. Pero sobre todo, demuestrate que eres una buena persona.